domingo, 29 de junio de 2008

A propósito del evangelio de María Magdalena

Creo que la entrada anterior de este blog merece un comentario de introducción.
Lo que se dice en esa entrada no es sino un resumen, hecho por mí (soy responsable de lo malo o de lo bueno del mismo), de un libro que Daniel Meurois publicó en el año 2.000 sobre el Evangelio de María Magdalena. En aquellos años yo ya había leído libros de Daniel Meurois, conocía su visión gnóstica y sus afirmaciones de que muchas de las cosas de sus libros (por ejemplo: El otro rostro de Jesús) las había conocido leyendo en los Anales del Tiempo.
Asistí a la conferencia que dio en Barcelona como introducción a la puesta en circulación del libro sobre el Evangelio de María Mag. en la que apuntó los motivos que lo llevaron a investigar y escribir el citado libro.
En la introducción al mismo dice el autor:

"Quiero insistir, de todos modos, en que las cuestiones en las que me he detenido (en el libro) constituyen puntos importantes de las enseñanzas que Cristo impartió a sus allegados. Mis numerosas y largas exploraciones por los Anales del Tiempo son las que me impulsan a afirmarlo..."

Confieso que los Anales del Tiempo son un verdadero misterio para mí, pero por otra parte todo cuanto dicen los libros de D. Meurois encajan perfectamente con los hechos que por otras fuentes conocemos y son un brillante ejemplo de la visión gnóstica de la fe cristiana.
Con respecto al libro que tratamos, él afirma:

"Que yo sepa no existen más que dos o tres traducciones del Evangelio de María en lengua francesa. Todas ellas se han hecho, al parecer, a partir del manuscrito copto conservado desde 1896 en el Departamento de Egiptología de los Museos Nacionales de Berlín.
Mi trabajo difiere radicalmente de dichas traducciones, no sólo porque ofrece una restitución del texto en su integridad, sino también porque está realizado a partir de la visión de un manuscrito básico que, en este caso, fue redactado en griego clásico. ...me parece cierto que los pliegos coptos de los que hoy tenemos conocimiento son una transcripción más tardía y acondicionada...
A través de mi percepción extracorpórea, los pliegos se me han presentado trazados con tinta negra y en caracteres griegos sobre pergamino..."

La Mariham de los escritos coptos de este Evangelio, es la Myriam, o María Magdalena, conocida por los cristianos. De este manuscrito copto faltan las páginas 1-6 y 11-14. En cambio el libro de D. Meurois presente 18 pliegos completos, que aún no siendo idénticos al manuscrito copto (algo muy normal para la época de la que se trata) sí que son muy similares.

Sea lo que sea de las incursiones en los Anales Akásicos, realmente no es un método que podamos llamar científico en el término que hoy damos a la palabra, pero... ¿es esto suficiente para negar la validez de lo que se dice en los 18 pliegos?
Para mí encaja plenamente en la visión que yo tengo hoy sobre Jesús de Nazaret, y que he ido elaborando a base de más de 50 años de estudios y oraciones.

Por esto, me ha parecido oportuno y conveniente colgar el resumen del Evangelio de Myriam (María Magdalena), que presenta una Fe muy distinta a la oficial.
Por último añadir, no sé si lo hago en el resumen, creo que no, que D. Meurois afirma no haber encontrado en sus incursiones en los Anales Akásicos, que utilizó para descubrir el Evangelio de María, ningún dato que pueda confirmar que Jesús y María formaran pareja. Según él, sólo se puede afirmar con seguridad que María era la discípula bienamada del Maestro, algo parecido a lo que ya afirma el Evangelio Apócrifo de Felipe que dice que María era la "compañera" (la que come el pan,cum panibus) del Maestro. Y la palabra compañaera no equivalía a pareja.
Esta duda de momento no la podemos resolver.

No hay comentarios: